Dave tiene cuarenta y tantos años, es de aspecto agradable y viste de manera elegante, a pesar de que su atuendo (un traje blanco, corbata negra e impecable pañuelo negro metido en el bolsillo de su saco) se remonta a la época disco de los años 70. Pero más allá de su vestimenta, hay algo en él que no está del todo bien. En definitiva, no pertenece al vecindario, incluso la manera en como camina es extraña. Conforme se abre paso por las calles de Nueva York, una de sus piernas sale disparada demasiado lejos con cada paso que da, como si no estuviera a gusto dentro de su propio cuerpo.Y por una buena razón: adentro de “Dave” hay una tripulación en miniatura que intenta febrilmente dirigir toda acción y conversación de Dave. En cada sección de su “cuerpo” un experimentado miembro de la tripulación manipula una consola de alta tecnología que controla los movimientos de Dave.
Pero la tripulación, bajo la dirección del capitán de quien Dave tomó su físico, está experimentando una ardua curva de aprendizaje.
Conforme navegan lentamente a través de “retos” a los que los humanos nos enfrentamos a diario, comienzan a experimentar algo con efectos mucho más profundos. Una ráfaga de emoción toma por sorpresa a la tripulación, gente que proviene de un lugar donde los sentimientos y la individualidad son desalentados. Dave está cambiando de dentro hacia fuera, y viceversa.
Nuestra opinión: n n n n n
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