9 de abril de 2010

Caso 39

Emily Jenkins es una trabajadora social especializada en problemas familiares que está a punto de comenzar su caso número 39: Lillith Sullivan es una niña de diez años a quien sus padres tratan de hacerle daño en reiteradas oportunidades. Alejándose de lo que su profesión recomienda, Emily decide involucrarse personalmente en el caso, ofreciéndole a la pequeña un lugar para vivir hasta que consiga una familia adoptiva. Es allí cunado la verdad comienza a ser revelada… ¿Qué fue lo que en realidad llevó a la familia de Lillith al colapso nervioso? ¿Por qué todos los que entran en contacto con esta chica parecen perder súbitamente la razón?

El film, con notables problemas de fluidez en la narración y una edición bastante torpe, tiene a una casi omnipresente Renée Zellweger hablando en un irritante tono de voz que recuerda a las pequeñas sabelotodo y mandonas del colegio primario. Lo que es peor aún, los momentos que pretenden generan tensión sólo logran sonrisas burlonas debido a la mediocre dirección del alemán Christian Alvart y al inverosímil guión de Ray Wright (“Latidos”).

¿Cabe alguna duda de por qué Caso 39 jamás fue estrenada en Estados Unidos y demoró tres años en llegar a las pantallas del resto del mundo?

Nuestra opinión: n n n n n

2 comentarios:

Anónimo dijo...

"Alejandose de lo que su profesion recomienda????". que es lo que has visto amigo. ella se lleva a la niña pues sus padres la quisieron quemar viva en un horno, jajaja. Ay DIos mio, un crítico que no ve la película, increíble.
Ignorante.

Damian Serviddio dijo...

Lamentablemente, sí la he visto... y entera. La frase dice "Alejándose de lo que su profesión recomienda, Emily decide involucrarse personalmente en el caso", ya que una asistente social tiene otros recursos para salvaguardar la salud de un niño antes de "decidir" llevarselo a su propia casa.