“La vida es aburrida y está llena de dolor”, dice Juan Antonio en la piel de Javier Bardem. ¿Por qué no disfrutarla entonces lo más que se pueda? Es él, un pintor español desinhibido, quien conocerá a Vicky y Cristina, dos turistas norteamericanas (Scarlett Johansson y Rebecca Hall) que en su visita a España ven como su mundo comienza a desintegrarse de manera compleja. Mas la historia tiene otro vértice explosivo: María Elena (Penélope Cruz), la ex mujer del pintor, quien tiene graves problemas paranoicos y sólo piensa en matar a todos los que la conflictuan.
Bardem pone en juego toda su seducción para convertirse en el artista latino sexy capaz de acostarse con Vicky, Cristina, María Elena… por separado y en conjunto; al tiempo que Rebecca Hall muestra grandes dotes para la comedia, por más sutil que el humor expresado desde la pluma de Woody Allen pueda parecer. Johansson es un poco exagerada e su composición, intentando ser la versión femenina de su director, mientras que Penélope Cruz representa el aire fresco de la historia y sin dudas lo mejor del film (ya fue nominada a los Globo de Oro y al Oscar por esta interpretación).
La calidez de Barcelona es expresada no sólo a través del recorrido por los lugares culturales e históricos de guía turística clásica, sino también por la utilización de filtros y fotografía cercanos al sepia.
Vale destacar que las discusiones bilingües entre el triángulo amoroso central no tienen desperdicio, erigiéndose dentro de lo mejor de las comedias de las últimas temporadas.
Nuestra opinión: n n n n n
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