Dos décadas de paz sindical se quebraron el jueves por la noche cuando los guionistas de cine y TV declararon que iniciarán una huelga masiva por primera vez desde 1988. La huelga enfrentará a los guionistas, cuya posición ha sido erosionada por los reality shows y los crecientes cambios tecnológicos, con los estudios de cine y las cadenas de televisión que son parte de corporaciones como General Electric y News Corp.
La huelga amenaza con poner un parate instantáneo a talk shows televisivos, como el de David Letterman, que se apoyan en guionistas que les arman los monólogos y sketches. Y si la huelga continúa por mucho tiempo, el público podrá ser testigo de una eventual suspensión de novelas, series y películas, en tanto se vayan acabando su banco de guiones terminados. La huelga de guionistas tendrá un impacto inmediato en más de 200.000 trabajadores de la industria de cine y TV en los Estados Unidos y los miles que producen o venden entretenimiento para el resto del mundo. La disputa puede generar mayores problemas laborales, ya que tanto directores como actores enfrentarán problemas similares cuando sus contratos expiren en junio de 2008.
A largo plazo, una serie de huelgas múltiples podría llevar a un cambio drástico de la economía hollywoodense ya que se redefiniría la relación de la industria con sus fuerzas de trabajo en una época en la que las ventas de DVD están bajando y los cambiantes mercados del cine y la TV están llevando a los trabajadores a pelear por lo que ellos consideran que es un "porcentaje justo" de la aún difusa explosión digital.
El llamado a huelga viene luego de tres meses de duras negociaciones. Los dos lados terminaron enfrentados por el reclamo de los guionistas de un importante aumento de sus pagos por la reutilización de películas y shows en DVDs y por la distribución de esos trabajos en internet, teléfonos celulares y otros nuevos medios. Los productores se negaron a aumentar los pagos por los DVDs y quisieron postergar las demandas relacionadas a la distribución electrónica ya que, por las cambiantes tecnologías, todavía no está muy bien definido que forma tendrá.
En un comunicado, el presidente de la alianza de productores, J. Nicholas Counter III, dijo: "Por la actitud del sindicato de guionistas en la mesa de negociaciones debo admitir que no me sorprende el anuncio. Pero nosotros estamos listos y preparados para arreglar los contratos durante el fin de semana".
Algunos, en cambio, se beneficiarán con la huelga, como la cadena de cafés Starbucks, que tendrá a muchas más personas desocupadas buscando donde pasar el rato. Otras compañías obtendrán sus ganancias financiando a los que están sin trabajo. En 1988, la huelga de los guionistas duró cinco meses.
* Publicado en diario Clarin de ayer.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario