Esta comedia romántica cuenta la historia de Bertram Pincus (Ricky Gervais), un irritable dentista de Manhattan que desarrolla la molesta habilidad de ver gente muerta. Pero cuando un insistente fantasma (Greg Kinnear) mete a Bertram en una conspiración romántica que involucra a la mujer que dejó viuda, todos terminan enredados en un aprieto entre el ahora y el más allá.
Un fantasma fastidioso es una historia con varios lugares comunes, pero con un desarrollo bastante agradable. Gervais como ese irascible, antisocial y desopilante odontólogo no tiene desperdicio, en especial la conversación en donde intenta explicar como una colonoscopía con demasiada anestesia lo hace ser testigo de todos los difuntos que pululan por su ciudad.
Nuestra opinión: n n n n n
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